Con las mejores instalaciones
Los cebaderos están montados para que el bienestar de los animales esté garantizado, y lo más importante, teniendo controles de temperatura tanto en invierno como en verano con una buena ventilación para que prime la comodidad de los animales.
Están distribuidos en parques pequeños, con el fin de poder hacer muchas clasificaciones de pesos y poder tenerlos según tamaños más anchos y repartidos.
El bienestar de los corderos es beneficio para el consumidor final y para nuestros clientes.
Cuanto más acondicionados estén y en las mejores condiciones ambientales y sanitarias menos bajas y más transformación hacen diariamente y, sobre todo primordial, mejor calidad y sabor.
Todo es poco para lograr lo que buscamos, un producto estrella como es el auténtico cordero manchego.
Las instalaciones frigoríficas están ubicadas al lado del matadero lo que nos favorece a la hora del traslado de las canales, hasta el punto de distribución. Al eliminar el exceso de transportes las canales no pierden la cadena de frio y siguen manteniendo la calidad que buscan los paladares más exigentes.
Las canales son recepcionadas a su llegada en sala de trabajo, con la temperatura idónea, se pesan y se etiquetan cada una y se meten en la cámara, para que cuanto antes sean repartidas a su destino con su temperatura apropiada.
